“De una interpretación
que no fuera del sentido” 10/09/16
Roberto Bortnik
Hay
dos cuestiones que Lacan comienza a criticar en relación a la interpretación
freudiana: por un lado, aquella que sostiene en el seminario 16 acerca del uso freudiano del Complejo de
Edipo. Por otro, acerca de la necesidad
de que la interpretación sea fuera de sentido para ser propiamente analítica,
una interpretación que fuera más allá del sentido, pero a condición de servirse de él de la buena
manera.
En
1900, en “La interpretación de los sueños”, Freud habla de sustituir un
significante por otro para que reestablezca la cadena de sentido. Hay por lo
menos dos modos de interpretación que ya se pueden ver en el caso Dora: Una
breve (Por ejemplo cuando interpreta esa vacilación de Dora potencia/
impotencia del padre), que crea un sin-sentido y deja un resto, es incompleta. Una
extensa, cuando inmediatamente luego de esa intervención da una explicación sobre
la interpretación, la cual tiene un sentido, tiende a ser completa.
El
primero de estos dos modos es del que se sirve Lacan. La interpretación no debe ser una traducción,
no debe explicar, ni ser comprendida, no debe favorecer identificaciones, ni nombrar
un objeto de deseo ni al ser del sujeto. Una interpretación que no fuera del
sentido, para que alcance lo real, desencadenando la verdad como tal.
No
existe LA interpretación lacaniana, sino que hay nombres lacanianos de la
interpretación que van variando al modo de una superación: puntuación
afortunada, palabra plena, evocación, alusión, metáfora, oráculo, enigma, cita,
equívoco.
La
interpretación como enigma es introducida por Lacan en la segunda clase del
seminario 17, “El reverso del psicoanálisis”, articulada a otra modalidad de interpretación,
la cita. La misma es recogida de la trama del discurso del analizante, hay un
contexto de significación para ese enigma, sin embargo produce un “que me quiso
decir” porque se da a entender pero no se entiende.
Este
modo de interpretación, el enigma, es un hecho de lenguaje, un decir a medias, un
medio decir de la verdad, que por estructura no puede decirse toda. Un
significante que no remite a otro y se vuelve enigmático como tal. Una
enunciación relacionada a un significante irreductible traumático al que está
sujeto como Sujeto.
El
termino enigma vuelve a aparecer en un
escrito de 1973, publicado en 1975,
titulado “Introducción a la edición alemana” en Otros Escritos. Aquí
Lacan pone de manifiesto que el efecto de una interpretación es a posteriori,
hay algo de incalculable en esta, ya que algo del sentido se pierde.
“El sentido del sentido en mi práctica se capta (Begriff) por el hecho de que
se fuga: a entender como de un tonel no como de un escaparse. Es por el hecho
de que se fuga (en el sentido: tonel) por lo que un discurso toma su sentido
esto es porque sus efectos son imposibles de calcular”
Crisela
Oggianu y Tamara Gastaud